La historia del hermano de Beausejour que estudia en la UCN de Antofagasta

Por José Morales D.

El 2010 es un año que difícilmente olvidará la familia del seleccionado nacional, Jean André Beausejour, luego del terremoto 7,0 ocurrido en Haití. Esto implicó que decidiera traer a su padre y hermanos a vivir a Chile, dado que el país antillano quedara muy afectado e inestable por la catástrofe que dejó un saldo de más de 300 mil muertos.

Uno de los integrantes del grupo familiar era el joven haitiano Sankara Beasejour (20), quien llegaba a Chile cargado de sueños e ilusiones. Era un viaje temporal a Santiago, sin embargo, a él y sus hermanos les gustó nuestro país y optaron por radicarse de manera definitiva en la comuna de Quilicura.

Sankara, el 2015, luego de cursar la enseñanza media en el Colegio Manquecura Valle Lo Campino, decidió tomar una importante decisión, entrar a la Universidad Católica del Norte de Antofagasta, a la carrera de Ingeniería Civil Metalúrgica. Según dijo motivado por estudiar cerca del rubro minero, donde encontraría una metodología de estudio más práctica.

De su llegada a Chile, de la vida en Antofagasta, de lo que significa ser hermano de Jean y de sus proyectos, Sankara Beausejour conversó en exclusivo con El Pensador 2.

-¿Cómo fue tu llegada a Chile?

Yo nací y me críe en Haití hasta los 13 años, hasta que ocurrió el terremoto del 2010. El país quedó muy inestable, la catástrofe fue grande. Entonces mi hermano (Jean) que vivía en Chile, nos dijo que viniéramos a este país. En principio era temporal, pero con el tiempo decidimos quedarnos. Con mis hermanos ya nos habíamos acostumbrados y nos estaba gustando lo que estábamos viviendo, por lo que mi familia decidió y optó por quedarse.

-¿Cómo fue tu infancia en Haití? ¿Qué recuerdos tienes?

Haití es un país como se ve en los medios, bastante difícil pero no es imposible. No es un país donde no se den oportunidades o que sea algo crítico. Existe una vida bastante normal. Yo en particular tenía una vida normal y soy un agradecido de la vida que tuve allá, vivía muy bien, a pesar que mi familia es esforzada pero teníamos un buen pasar.

-¿Cómo se gestó la llegada a Antofagasta, especialmente a la UCN?

De chico siempre quise ser profesional, siempre me gustó investigar sobre las cosas y primero pensaba que mi camino era por las humanidades, pues quería estudiar ciencias políticas; pasé por varias áreas porque quería ser profesional como mi papá (Coty Beausejour). Pero después se me hizo más difícil y luego me empezó a gustar las matemáticas, la física hasta que descubrí la Ingeniería Civil Metalúrgica y quise optar por esa carrera, aunque encontré que en Santiago no me iba a desarrollar tanto como estar en Antofagasta, una zona donde se desarrolla la carrera por las mineras y tiene un fin más práctico. Pensé en eso y quise aventurarme en esta etapa.

-¿Fue difícil la decisión de venir al norte?

En un principio siempre supe que iba a ser muy difícil, obviamente muchas veces pensé en desistir, en rendirme. Pero con el tiempo me empezó a ir bien en la UCN y me empecé a acostumbrar. Uno termina por entender que en la vida nada es un regalo, por ende uno tiene que esforzarse.

-¿Qué te ha parecido Antofagasta? ¿Te gusta la ciudad?

Al principio no me gustaba mucho, por ser una ciudad chica. Yo estaba acostumbrado en vivir en ciudad más grande. Con el tiempo me fue gustando Antofagasta porque la gente es más humana, se preocupa del otro. En cambio la gente en Santiago la vida es más acelerada y se preocupan más por ellos mismos, son más fríos.

-¿Cómo te han tratado en la UCN, principalmente tus compañeros?

Bastante bien, aunque igual uno extraña a la familia y mis hermanos, porque no es lo mismo vivir solo. Pero me quedo con las cosas buenas, he tenido buen recibimiento, tengo muchos amigos, la gente es amigable conmigo.

-¿Cuáles son tus metas a largo plazo en la UCN y en Antofagasta?

Obviamente terminar con la carrera, pero por ahora eso no más. Uno debe ver las cosas con calma, ir de proceso a proceso. No soy de hacerme grandes expectativas en el tiempo, me pongo una meta fija y así voy sucesivamente.

-¿Te reconocen en la universidad por ser hermano de Jean Beausejour? ¿Alguna anécdota?

A esta altura ya es bastante conocido el tema porque con los años se corre la voz. Por lo que soy muy reconocido, a mí me parece bien y no me molesta. Me gusta compartir con la gente, no me gusta que ellos piensen que soy creído, que no hablo con la gente o que me creo superior. Es todo lo contrario, a mí me gusta conversar y compartir con todos.

-¿Eres hincha de algún equipo chileno?

Así es, me gusta la Universidad de Chile…

-¿Y cómo fue para tí cuando tu hermano fichó por Colo Colo?

Cuando fichó por Colo Colo, uno sabe que siendo de la familia uno no puede perder el entusiasmo de apoyarlo. A pesar que jugaba por el equipo rival, siempre ha estado el apoyo constante. Yo veía todos sus partidos, de hecho cuando él tenía la pelota yo quería que hiciera las cosas bien y en un momento terminé casi apoyando al equipo rival.

-¿Qué significa Jean Beausejour en tu vida? ¿Es tu referente?

Primero lo veo como hermano. La gente siempre me pregunta qué es convivir con un ídolo máximo, obviamente yo lo siento como un ídolo, alguien que admiro y respeto porque se ha esforzado mucho por lo que ha logrado en la vida, pero lo veo como hermano. Para mí es difícil verlo como un ídolo intocable.

-¿Es difícil ser el hermano de un jugador tan conocido y que pertenece a la “generación dorada” del fútbol chileno?

En un punto es bien difícil, a mí no me gusta cuando la gente lo crítica en mi cara. Igual he tenido un par de enfrentamientos por aquello, porque cuando son personas cercanas a mí y lo hacen en mi cara, yo lo siento como ofensa y ahí tomo parte. Lo difícil es estar expuesto a esas críticas, pero en general no es un mayor privilegio. Porque encuentro que cada uno tiene que formar su camino en la vida, uno no puede vivir bajo la sombra de alguien, por más familiar que sea.

-¿Has hablado con Jean tras el triunfo con Portugal? ¿Qué te ha dicho?

No mucho. Él es una persona que no se conecta mucho a redes sociales. No es fanático de eso, no es muy activo, de hecho hace poco se hizo un Instagram (ríe).

-¿Cómo está él desde su estadía en Rusia por la Copa Confederaciones?

Está bien, está muy tranquilo…

-Te noté muy confiado tras el paso de Chile a la final, ¿se esperaba esta actuación?

(Ríe) No estaba tan confiado, pero sabía que Chile iba jugar con todo. Cuando el equipo siempre juega con hambre de ganar, salen victoriosos…

-Por último, en Santiago se ha dado mucho que los haitianos han visto los partidos de nuestra selección y ven a Jean como su gran ídolo ¿Qué opinas al respecto?

Los haitianos se han vuelto fanáticos de nuestra selección, porque sienten que uno de ellos está jugando en la cancha. Cuando juega Chile, dicen “ahí está el haitiano, él es nuestro orgullo”, siempre lo apoyan.

-¿Jean se ha juntado con ellos (haitianos)? ¿Los apoya?

Mi hermano ha hecho hartas actividades con ellos, ha apoyado en lo que puede. Los reconoce bastante…