Altas denuncias ciudadanas: vecinos del sector sur de Antofagasta exigen medidas estrictas para locales nocturnos que infrinjan la norma de ruido

Por Constanza Cortés Luksic

Una problemática que no solo afecta al medio ambiente, sino que también a la comunidad antofagastina que demanda resguardar su salud y entregar tranquilidad a la ciudad.

Desde que finalizó la cuarentena en Antofagasta y se reactivó la vida nocturna, se observó un crecimiento exponencial de denuncias ciudadanas sobre la reiterada superación de la norma de ruido por parte de los locales nocturnos establecidos en el sector costero de la ciudad. Frente a esta situación, la ciudadanía afectada está cansada de los ruidos intensos y constantes en sus vecindarios, los cuales impiden el adecuado descanso de las familias.

“Yo le he hablado un montón de veces a distintos recintos nocturnos y nunca he recibido respuesta por parte de ellos. No hay control de Carabineros ni de la Municipalidad”, describe Francisca Hernández, vecina del sector Playa Blanca de Antofagasta, quien reconoce vivir vulnerada por la contaminación acústica.

Según el Decreto Supremo N° 38/2011 del Ministerio de Medio Ambiente, que regula la emisión de ruidos generados por fuentes fijas, en las zonas residenciales puede haber un nivel de ruido máximo que varía entre 55 dB, durante el día, y 45 dB, durante la noche.

Al respecto, la psicóloga Carolyn Saravia, académica de la carrera de psicología de la UA, explicó en el Mercurio de Antofagasta, que estar expuestos a ruido constante provoca molestias, angustia, sensación de desagrado, irritabilidad, ansiedad, agresividad, pérdida de concentración, disminución de la efectividad en el trabajo, abulia y trastornos del sueño, todo lo cual inevitablemente llevará a un estado de alerta, de ansiedad y estrés.

La ultima fiscalización de, la Superintendencia Del Medio Ambiente (SMA) selló los equipos de música del Pub Terraza Catedral, por el incumplimiento constante de las obligaciones que se establecen en materia de ruido, lo que le entrega esperanzas a los vecinos del sector sur de Antofagasta que llevan años viviendo la misma problemática.